CLICK HERE FOR BLOGGER TEMPLATES AND MYSPACE LAYOUTS »

jueves, 5 de febrero de 2009

Capitulo 2

Image Hosted by ImageShack.us


Marina suspiró y se decidió a abrir la puerta que daba a la calle. El frío se apoderó del cuerpo de Marina, quien hacía un gran esfuerzo por andar sobre la blanca capa de nieve que invadía el pueblo. Las calles estaban completamente vacías. Marina caminaba a paso ligero por la acera cuando de repente oyó una voz de un hombre que gritaba:
- !Ricco, no! !Vuelve!
No le dio tiempo a darse la vuelta para comprobar de quién se trataba cuando una fuerza inhumana hizo que Marina formara parte de la nieve que yacía en el suelo. Alarmada, tapó su cabeza con los brazos hasta que pasados unos segundos aquel hombre sujetó con fuerzas esa bestia que parecía tratarse de un perro.
- Lo siento mucho, estaba paseando a mi perro cuando ha salido disparado y me ha resultado imposible agarrarlo, ya ves que es grande, ¿estás bien?- Dijo el dueño de aquel perro, ayudando a Marina a levantarse. Marina pudo comprobar que se trataba de un joven de unos 27 años, alto y de pelo castaño claro. Era la primera vez que Marina lo veía, a pesar de que el pueblo era bastante pequeño.
- Si, bueno, ha sido el susto nada más, no te preocupes- dijo Marina sacudiendose los pantalones como si el agua pudiese desaparecer con unos golpecitos.
- Bueno, está bien, lo siento de nuevo. Hasta luego- El joven mostró un rostro preocupado y con una sonrisa un tanto forzada se despidió, alejándose con su perro.

lunes, 2 de febrero de 2009

Capítulo 1



Era una tarde fría de invierno. La nieve empezaba a caer y todo era de ese color blanco que a Marina tanto fascinaba. Se asomó a la ventana para ver a sus hermanos jugando en la nieve. Recordaba aquella sensación que tienen todos los niños pequeños al ver los primeros copos de nieve caer y la nostalgia empezaba a apoderarse de ella, era tan feliz hace tan solo ocho o nueve años. Recordaba toda su infancia con alegría y odiaba aquel día en el que se dio cuenta que ya no era una niña. Ya era una mujer que no podía seguir jugando a las muñecas y que debía empezar a asimilar todas las responsabilidades que esto traía. Se encontraba sumergida en todos sus recuerdos cuando escuchó su nombre a lo lejos.
-¡Marina!-su madre la llamaba desde la cocina
-¿Que mamá?
-Hija llevo un rato llamándote. ¿Estas ocupada ahora mismo?
-No mama, ¿que quieres?
-Por favor ve a la tienda y compra algo de pan que ya está tu padre al llegar y no me da tiempo de ir.
-Puff mama,con el frió que hace y tengo que salir...
Marina siguió protestando mientras se ponía el chaquetón y buscaba el dinero. Siempre solía hacer lo que su madre le decía, pero primero debía de protestar para quedarse tranquila. En algunos aspectos seguía siendo como una niña, y no como una muchacha de 18 años

sábado, 31 de enero de 2009

Y vuelves

Y vuelves a despedirte. Vuelves a decirme dulces
palabras al oído antes de dar la vuelta y
desaparecer. Ahora solo me queda la incertidumbre
de saber cuanto queda para que nos volvamos
a encontrar. En este juego eres tu el que pones
las reglas. Yo soy solo una ficha mas, una ficha
que mueves a tu antojo. Solo tengo un papel y es
hacer todo lo que tu desees. Que estúpida me
siento cuando soy yo la que no pone las reglas,
pero prefiero resignarme y tenerte a ratos ante que
perderte para siempre. Quizás pase un mes o quizás
esta haya sido la ultima vez que has estado a mi lado.
Todo es tan dudoso cuando se trata de ti. Todo es
humo, apareces y desapareces en los momentos mas
inoportunos, pero todo se vuelve fácil cuando respiro
tu aroma. Y vuelves cuando ya casi no me acordaba
de ti, haciendo que mis sueños se vuelvan pesadillas.
Pesadillas que no me dejan olvidar los momentos de
soledad que causan tu ausencia


No soporto ver cómo se vα αlejαndo el tren
y ver cαer mis lαgrimαs sobre el αndén
no sé si existe el destino, solo siento que te quiero,
cuαndo te veo αl finαl de la víα siento que me muero…
cada kilómetro en mi cαbezα se convierte en gαnαs de tenerte
no me importα tener que sufrir α veces pαrα poder verte.
Espero impaciente α que lα αrenα del reloj baje,
vivo tαchando los días hαstα que el tiempo se pαre
pαrα no sepαrαrnos nuncα mαs
el pensarte cada día va aumentando lαs gαnαs
de besαrte, de dαrte un αbrαzo.
Ojala supiera que no hαy que esperαr,
que nαdα nos vα α sepαrαr,
que podemos estar juntos hasta el final…
Meses, horαs, minutos, cαdα segundo contigo es vαlioso,
pero no te tengo…
me queda seguir soñando con ese tren,
soñando que algún día se parará y volverá a buscarme
entonces seré feliz, pero hasta ese momento
esperaré hasta el final de los tiempos
porque te quiero
Obsessed girL